Las investigaciones de Manuel Castells demostraron su pertinencia a la luz de las recientes movilizaciones sociales en Oriente medio. En función de ello, actualizamos una anterior publicación, agregando las notas más recientes, en las que se puede ver cómo la teoría social, cuando es pertinente y actual, puede ayudar a comprender la realidad.Castells es uno de los sociólogos contemporáneos más importantes. Se encuentra entre los cinco más citados en el campo de la sociología y sus obras se caracterizan por una profusa base empírica y por un sustento científico indiscutible [ver Castells]. No obstante ello, su principal tesis parece ser desconocida por la mayoría de los divulgadores de los medios de comunicación. En su texto ha dejado claro que el poder no son los medios, sino que apenas son los actores en el campo de la comunicación que es donde se juega el poder. En su última obra Comunicación y poder (2009) deja claro que las audiencias no resultan influidas por los medios (cosa, hay que recordarlo, demostrada reiteradamente hace décadas) sino que demuestra a partir de varias investigaciones empíricas que el público no buscan los medios para informarse sino que eligen aquellos que les ayudan a ratificar sus opiniones.
Basa sus conclusiones en los estudios de lingüística cognitiva y en cómo los marcos de pensamiento operan en el procesamiento de información. Un referente de esta corriente es George Lakoff que ha elaborado un análisis interesante de cómo interactúan los marcos y la comunicación pública en la política. El libro de Lakoff No pienses en un elefante analiza especialmente la campaña política norteamericana de los últimos tiempos, e incluye reflexiones sobre temas de debate como la libertad de matrimonio, que perfectamente podrían extrapolarse a la discusión que se está desarrollando por estos días en Argentina [ver nota “No pienses en gay”].
Justamente los marcos se aplican al tema mismo de la comunicación: seguimos repitiendo conceptos que se han erradicado científicamente pero que están tan instalados en el sentido común que se repiten sin reflexión. En la conferencia que dio en Buenos Aires el pasado 28 de junio, Castells argumentó firmemente en contra de algunos mitos que algunos especialistas desactualizados insisten en repetir, cuyos fundamentos pueden encontrarse en su extenso libro:
Mito “Internet es la revolución”: La revolución no es internet sino la comunicación inalámbrica. Desde 2002 la comunicación es móvil. En 2010 hay 4700 millones de abonados (sobre una población mundial de 6700 millones). Lo que no es extraño si se considera que la edad de entrada al celular son los 5 años.
Mito “Los medios de comunicación de masas son el poder”: Castells plantea son el espacio donde se juega el poder (“No son el Cuarto Poder”, pág. 262). Y que la sociedad en red ha permitido que surgiera el contrapoder: la “autocomunicación de masas”, que permite que cualquier persona pueda difundir su mensaje personal en blogs, redes o youtube, y potencialmente obtener repercusión global. Y cita varios ejemplos donde la sociedad torció una fuerte embestida del poder político en los medios, como fue el caso Atocha en 2004.
Mito “Es necesario controlar los medios de comunicación”: No sólo no es necesario porque las audiencias no están mirando los medios masivos, sino que es imposible. Los medios del sistema de autocomunicación de masas no tienen un operador al que las restricciones puedan funcionarle.
Mito “Los enemigos son los monopolios de la comunicación”: Dice Castells que la autocomunicación de masas se basa en la “desintermediación comunicativa”, justamente porque los espacios de discusión y de generación de nuevos marcos ya no están en los medios masivos, sino en el poderoso sistema de intercambio que permite la red. La pluralidad informativa no viene del control de arriba hacia abajo, sino que es una tendencia que se está empujando de abajo hacia arriba.
Mito “los medios de comunicación deben servir a la política”: Dice Castells que la política va a entender el nuevo sistema de comunicación cuando acepte la autonomía ciudadana en los medios. La mayoría de los políticos, dijo Castells en su conferencia, siguen queriendo orientar el destino de la ciudadanía, y tienen verdadero terror de que se autodeterminen.
Mito “El Estado debe controlar la comunicación”: Dice Castells que en la sociedad en red se separó el control de la comunicación del Estado porque lo determinante no es el control de los medios, sino la capacidad potencia para intervenir en los procesos de comunicación. Quizás la conclusión que le permite rebatir esta idea, es la que mejor define la línea de pensamiento del sociólogo: “La comunicación es el poder pero somos nosotros los que determinamos el contenido de ese poder”.
Cerró su conferencia magistral con la siguiente reflexión que debería servirnos para repensar muchas de las cosas que tratamos en comunicación:
“El poder se lucha, se debate en las redes sociales, pero no está en las redes. Éstas son espacios comunicativos deonde se debate, se conversa”, la mayoría de las veces sin intermediación.
“Las redes son un espacio real, no virtual”. Nunca hubo una separación entre lo real y lo virtual. De hecho el hombre vive procesando símbolos, siempre ha sido virtual y físico. “Aun lo que está afuera de la red está modelado por lo que se discute en ella”.
Un camino de entrada para la tesis de su último libro son dos artículos publicados en la revista Telos (lástima que no siempre los links funcionan):
- Castells Manuel. “Comunicación, poder y contrapoder en la sociedad red (I). Los medios y la política”. Telos, Nº 74, enero-marzo 2008. [ir al artículo].
- Castells Manuel. “Comunicación, poder y contrapoder en la sociedad red. Los nuevos espacios de la comunicación”. Telos, Nº 75, abril-junio 2008. [ir al artículo]
- Castells Manuel. “Creatividad, innovación y cultura digital. Un mapa de sus interacciones”. Telos, Nº 77, marzo 2009. [ir al artículo]
Artículos en medios periodísticos:
- “La gran desconexión”, diario La Vanguardia, Barcelona, edición 3/3/11. [ir a la nota]
- ”Las insurrecciones populares en el mundo árabe son tal vez la transformación más importante que internet ha inducido y facilitado” (entrevista). Noticias de la Universitat Oberta de Catalunya. Febrero/11. [ir a la nota]
Si no es éste, seguro que van a encontrar otro material. El espíritu de la “autocomunicación de masas” acompaña a los que nos comunicamos en la red.